top of page

Roubini, cómo atenuar la crisis económica

  • Sara Cajo
  • 17 may 2016
  • 6 Min. de lectura

- Roubini fue unos de los primeros en predecir la crisis.

- El economista pretende dar a conocer el camino a seguir.


Nouriel Roubini, catedrático de Economía en la Universidad de Nueva York y autor de Cómo salimos de ésta (2010) ya advertía en 2006 frente a la audiencia del Fondo Monetario Internacional que la economía nacional no tardaría en sufrir un insólito estallido de la burbuja inmobiliaria, un alza en el precio del petróleo, un gran descenso de la confianza de los consumidores y una profunda recesión. Además cuando los propietarios de las viviendas dejaran de pagar sus hipotecas, todo el sistema financiero global quedaría paralizado.

En conclusión, la crisis hundiría los fondos de cobertura (fondos de alto riesgo o de gestión alternativa como las hipotecas subprime -con pocas obligaciones, escasa regulación y técnicas de inversión financiera no permitidas en los fondos tradicionales-) y los bancos de inversión -intermediarios financieros.

Cuatro años más tarde, empezada la crisis, publica su libro en el que defiende que éstas están ligadas al genoma del capitalismo y que, a pese a tener sus diferencias, siempre tienen algunos puntos en común que se deben revisar una vez finalizadas.

Este trabajo pretende servir de guía para pronosticar y evitar crisis mediante la exposición histórica de las crisis pasadas hasta la actual, incidiendo en las causas principales y aportando soluciones que podrían apaciguar los efectos de posibles crisis futuras.

Además de una completa introducción sobre las diferentes crisis y recesiones sufridas, así como la presentación de la crisis de 2007, el autor se centra en las causas de la crisis, en la que destacan principalmente: la innovación financiera –a través de sistemas como la titulización–; fracaso del gobierno corporativo –debido al problema entre “principal” o accionista y el “agente” o gerente, que al tener intereses individuales distintos, el egoísmo del agente puede hacerle actuar en contra del beneficio de la empresa o asumiendo demasiados riesgos para obtener rentas a corto plazo–; política de dinero fácil –debido a los prestatarios subprimes, que son aquellos de alto riesgo de impago; fallo del gobierno nacional –por las políticas monetarias y las políticas gubernamentales a favor de la adquisición de viviendas en propiedad– y sistema bancario en la sombra –tomaban dinero prestado de los depositantes de entidades a corto plazo que colocaban en valores ilíquidos y arriesgados a largo plazo– contribuyeron al inicio de la crisis.

Otro factor que agravó la crisis fue el riesgo inducido, que consiste en asumir más riesgo del que se debería por la convicción de que otro se hará responsable de cualquier consecuencia negativa. Esto favorecía el apalancamiento, llegando a deudas en los hogares del 100% del PIB en 2007 –en frente del 48% de 1981–.

El autor se posiciona en el transcurso de la lectura a favor de la intervención del Estado –contrario a la escuela austriaca que defiende el libre comercio y la autorregulación de los mercados–.

En cuanto a política fiscal se refiere, existe el gasto directo para estimular la demanda, recortes y devoluciones fiscales que en teoría animan a los consumidores a gastar y el “pago por transferencia” en el que el gobierno envía dinero a determinados grupos con escasez de dinero o bien a gobiernos locales y estatales en apuros. En la crisis actual se usaron las tres y ayudaron a frenar la inercia hacia la depresión, pero no hay que olvidar que tiene un coste: si el gobierno aumenta el gasto y los recortes fiscales se dispara el déficit presupuestario y se verá obligado a emitir más deuda que tendrá que saldar. También se ha de tener en cuenta que las familias en lugar de gastar pueden ahorrar –de hecho, es lo que hicieron en esta última crisis–.

Además Nouriel considera que aunque algunas medidas fiscales que se tomaron fueron una ruina y algunos rescates no estaban justificados, pero que los estímulos fiscales y el apoyo al sistema financiero evitaron que la Gran Recesión se convirtiera en otra Gran Depresión cuando la demanda privada experimentaba una caída libre.

El autor sugiere algunas reformas que ayudarían a incrementar la responsabilidad y transparencia del sistema financiero reformando el sistema de remuneración en el Wall Street, regularizando la titulación, permitiendo el escrutinio público de los derivados y controlando más de cerca a los supuestos guardianes del sistema: las agencias de calificación. Estas reformas asegurarían, además, que los bancos y otras entidades financieras tuvieran suficiente capital y suficiente liquidez para hacer frente a una crisis financiera considerable. Además pondrían fin a los abusos potenciales que se producen al tener a un pequeño oligopolio de bancos y bancos de inversión controlando prácticamente la totalidad del sistema de finanzas–si los derivados y otros fueran más transparentes, sería más difícil para estas empresas cobrar a sus clientes unos márgenes y unas comisiones desorbitadas–.

También incide en la importancia de evitar el arbitraje regulando todas las entidades y en coordinación con el resto del mundo para evitar que se desplacen a lugares con menor regulación. Finalmente propone la separación de los bancos comerciales de los de inversiones, prohibir la práctica de cualquier clase de operaciones de inversión de riesgo por cuenta propia así como actuar como fondos de cobertura o empresas de inversión de capital de riesgo y solo los bancos comerciales tendrían acceso a los seguros de depósitos y a la red de seguridad del gobierno.

El autor indica los problemas a los que se puede enfrentar EUA. Durante los últimos 20 años ha estado gastando más de lo que ha producido y ganado, y ha importado más de lo que ha exportado. A pasado de ser el mayor acreedor al mayor deudor, con lo que la balanza por cuenta corriente de activos tiene un saldo negativo –debe devolver el préstamo al exterior, por lo que verá reducidas sus reservas–.

Finalmente Roubini señala que otro posible futuro problema es la reticencia al dólar ante el euro o el yen. En 2009 los dólares constituían el 37% de las nuevas reservas adquiridas, lejos del 67% de la década anterior. En los próximos años, con el declive del poder norteamericano, y a falta de una superpotencia que pueda cooperar con otros poderes emergentes para recuperar la estabilidad de la economía global, seguirá habiendo crisis cada vez más frecuentes y virulentas.

En cuanto a la estructura del texto se refiere, se presentan de forma ordenada los antecedentes, causantes, desarrollo de la crisis y posibles soluciones y panoramas futuros. No obstante, si pretendía ser una guía, carece de un desglose por apartados mayor que permita la lectura por temas o focos de interés.

Respecto al lenguaje que utiliza el autor, no se pueden comprender algunos conceptos que se desarrollan sin un rodaje previo en economía, ya que, pese a que Roubini intenta explicar los conceptos que van apareciendo lo hace de manera técnica, por lo que la lectura puede resultar complicada para aquellos que no tengan nociones previas en economía.



Glosario:

Titulización: sistema en el que los activos ilíquidos como las hipotecas se pueden agrupar y transformar en activos líquidos (en vez de esperar 30 años para recuperar los fondos de una hipoteca se recibe un pago único por adelantado de los compradores el bono y los inversores que adquirían esos nuevos bonos recibirían una determinada parte de los ingresos procedentes de los miles de propietarios que iban pagando sus hipotecas). Con esto se podía negociar en el mercado abierto. La idea es sensata siempre y cuando los compradores de los valores puedan evaluar con precisión el riesgo, pero si eres un banco que liquida hipotecas recién acuñadas mediante el proceso de titulización, tu objetivo es vender tantas hipotecas como puedas lo más rápido posible, pero como el banco ya no afrontaba las consecuencias de conceder malos préstamos, tampoco supervisaba correctamente

Sistema bancario en la sombra: bautizado por Paul McCulley, es aquél sistema formado por instituciones financieras similares a los bancos con las mismas funciones pero que no están reguladas de la misma manera, de hecho, estaban desregularizados, cosa que favorecía a los préstamos de alto riesgo.

Apalancamiento: Usar el endeudamiento para financiar una inversión. Puede ser intercalado (permite tener beneficios o pérdidas) o sistemático o compuesto (un poco de apalancamiento inicial se convierte en una gran deuda). No hay problema cuando el precio de los valores se mantenga o aumente, pero no cuando se baja el valor de los activos, entonces se vende a precio de saldo y los prestamistas preocupados por la solvencia de los prestatarios pueden empezar a exigir un margen de capital aún mayor y coeficientes de apalancamiento inferiores como condición para refinanciar la deuda.

Ilíquido: es aquel valor del activo que no se puede convertir en efectivo con facilidad como pueden ser las maquinarias, terrenos etcétera. Pertenece principalmente al denominado activo no corriente del balance de situación de cualquier empresa, ya que pertenece al activo pero no se puede disponer de él con mucha rapidez.

Comments


Who's Behind The Blog
Recommanded Reading
Search By Tags
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black
  • Google+ Basic Black

© 2023 por "Lo Justo". Creado con Wix.com

Siguenos en:

  • Facebook Social Icon
  • Twitter Social Icon
  • YouTube Social  Icon
  • Instagram Social Icon
bottom of page